Mejora tu vida sexual utilizando lubricante

El sexo es uno de los pilares fundamentales de toda relación. Es tan importante como una buena comunicación, química y amor… y es que el sexo bien practicado pone en funcionamiento esos tres elementos.

Pero en el acto no sólo hablamo de penetración, hay una gama de cosas que hacer que aumentan el placer que la pareja pueda darse mutuamente. Y ¿por qué no? utilizar algunos juguetes, aceites o instrumentos parecidos siempre es bien recibido cuando es en pro del placer.

Justo aquí nos vamos a centrar… en esa vasta lista de cosas que podemos utilizar para darle a la vida sexual una fogosidad por mucho más tremenda. Entre ellos, uno de los mejores aliados de hombres y mujeres alrededor del mundo: el lubricante.

Tres razones para utilizar un lubricante

• Si tu vagina queda adolorida después del sexo: Es posible que si eres una mujer con problemas de lubricación, esto sea más común de lo que debería. No te escondas tras la fachada de que “es normal”. No lo es, es un problema; ya sea por falta de excitación, problemas hormonales o parecidos… esto puede traerte un dolor que te ahorrarás comprando un lubricante.

• Para practicar sexo anal: La dilatación en este tipo de encuentros es uno de los mayores aliados o enemigos, y la verdad es que aunque es uno de los preferidos por las parejas… puede traerte bastante dolor. Para favorecer la dilatación y evitarte un mal rato, puedes comprar un lubricante que te ayude.
• Para estimular el orgasmo: Algunos lubricantes son calientes, y sirven para hipersensibilizar la zona donde son aplicados, a fin de que sientas todo mucho más y mucho mejor. Eso, por supuesto, significa no sólo un sexo más intenso… sino también un orgasmo mucho más potente. Ojo, no abuses del lubricante caliente, ya que este puede llegar a arder cuando la zona está irritada.

Tipos de lubricantes

Térmicos

Son excelentes para encender el momento. Muchas personas los utilizan a manera de aceite para hacer masajes o esparcir por todo el cuerpo, gracias a su característica principal: calentar la zona. Puede ser realmente excitante y estimular el orgasmo, pero son propensos a generar irritaciones e infecciones.

Estimulantes

Están diseñados específicamente para estimular los tejidos del clítoris. Si te cuesta excitarte o llegar al orgasmo, estos lubricantes pueden hacer de tu vida sexual algo mucho más interesante.

Ecológicos

Algo que caracteriza a este tipo de lubricantes es que son hipoalergénicos, por lo que si tienes la piel sensible, puede que necesites utilizar estos para contrarrestar resequedad y alergia simultáneamente.

En supositorios

Este tipo de lubricantes fueron diseñados exclusivamente para el sexo anal. Una pastilla de lubricante que se disolverá en la zona, evitando que debas untar manualmente el lubricante en gel. Excelente para los hombres que deseen empezar a experimentar con su Punto G sin querer pasar por todo un proceso de dilatación, o para mujeres que quieran disfrutar de este tipo de sexo sin preocuparse por el dolor.

Espermicidas

Además de lubricantes, estos también son métodos anticonceptivos. Su propósito es evitar que los espermatozoides lleguen a la matriz… así podrás mantener relaciones sin preservativo con mayor tranquilidad. Aunque esto no quita que debas ser precavido, es bueno que tengas presente que su efectividad está entre el 75% y el 90%.

Con feromonas

Contienen -valga la redundancia- feromonas que fomentan el deseo sexual. Si sientes que no te excitas lo suficiente, esto no sólo resolverá el problema de la lubricación… hará mucho más fogoso tu encuentro sexual.

Ten presente que el sexo bien hecho puede fortalecer una relación enormemente. En ningún momento debes conformarte con el dolor, la rutina o lo básico. Tienes derecho a pasarlo bien, por eso échale un ojo a los lubricantes y aceites que más usan las parejas.